Si estás leyendo este artículo es porque quieres saber cómo limpiar algunas de tus prendas como las corbatas para hombres, que son fantásticas, pero viven en un sitio peligroso, justo ahí, delante de tu pecho, listo para recibir algún tipo de suciedad. En esta zona peligrosa culinaria, solo el jugador más diligente evitará terminar con manchas difíciles de quitar como las de café, mermelada, ketchup o tomate.
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Entonces, ¿qué hacer? ¿Tirarla? Sería perfecto que te compraras otra nueva, pero con ciertos consejos para que sepas cómo limpiarlas en un restaurante si te has manchado de vino, o en la oficina si te has ensuciado con tinta o sangre en un accidente, o bien en casa si tienes un pringue de chocolate o una mancha de aceite evitaras malgastar tu dinero o llevarlas a una tintorería o lavandería sin saber que las manchas van a ser eliminadas correctamente. Con estas recomendaciones los diseños de tus corbatas blancas o de colores quedarán impecables.
Para saber cómo tratar el derrame en una corvatta elegante o nudos de caballeros de cualquier material sea blanca o de color, ten en cuenta que existen algunas cosas que puedes hacer inmediatamente:
- Cuanto más veloz llegues a la mancha, mejor.
- Sumerge una servilleta de tela en agua mineral o algodón en alcohol metílico.
- Limpia la mancha suavemente y saca todo cuanto puedas.
- No la frotes y hazlo suave, ya que eso va a hacer que la mancha penetre más de manera profunda en el textil, y podría hacer que el tono se corra. También puedes utilizar un poco de jabón de vajillas.
- Si te has manchado con algo graso, procura echar talco sobre la suciedad porque estos polvos absorberán la grasa. Espolvorea, espera unas horas y quítale el polvo con un trapo limpio.
Ten cuidado con los diferentes tipos de telas. Si no has logrado eliminar totalmente la mancha es hora de que lo sigas intentando en tu casa.
Para dar el próximo paso necesitas saber de qué material textil está hecha la corbata, puede que en la etiqueta lo encuentres. Diferentes tejidos requieren diferentes tratamientos.
Cómo lavar corbatas según el tipo de textil sin dañarlas
A continuación puedes ver una lista de tipos de telas para saber como quitar manchas rebeldes en las prendas delicadas. Los tres materiales o textiles más comunes de los que están hechas las corbatas son el poliéster o microfibra de poliéster, seda y algodón.
Poliéster y microfibra de poliéster
El poliéster y la microfibra de poliéster son telas bastante resistentes, y por consiguiente este tipo de corbatas son más simples de lavar.
Se trata de materiales afines, la microfibra de poliéster es un poco más resistente. Por fortuna, los dos materiales pueden ser lavados en tu casa, no se requiere limpieza o lavar en seco. Este es el procedimiento que te recomendamos para quitar la suciedad de la corbata. Ten presente que los resultados pueden cambiar dependiendo de la composición del churrete.
Lave en la lavadora en frío programando un ciclo de lavado corto. Se puede emplear una pequeña cantidad de detergente para la ropa. No agregue suavizante de telas o blanqueador, menos en las blancas. El blanqueador puede volver amarillenta la prenda.
Si crees que tu lavarropas no va a eliminar la suciedad, o si el corbatón es frágil o delicado, para tratar la mancha lava a mano en agua fría con una pequeña cantidad de detergente para ropa. Enjuaga suavemente y ponla a secar.
Para evitar arrugas, la mayor parte de las corvattas de poliéster se pueden secar a baja temperatura hasta treinta minutos, bien sea de forma natural al aire libre o con una estufa a cierta distancia de la prenda. Nunca las metas en una secadora.
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Asegúrate de no plancharla antes de sacar cualquier suciedad. El calor de una plancha va a dejar la mancha para siempre. Si se lava con otra ropa, asegúrate de que las que son blancas se lavan con la ropa más clara o blanca, y las oscuras con la ropa oscura, etcétera Además de esto, no las laves con otras prendas de algodón o otros materiales que generan mucha pelusa. La pelusa se va a pegar a la prenda de microfibra de poliéster, y es muy engorroso quitarlas.
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Otra de las recomendaciones para limpiar las manchas en el textil de poliéster es sellar la corbata en un recipiente de plástico con una pequeña cantidad de detergente líquido, o jabón para platos, y agua caliente. Agítala y déjala descansar o reposar a lo largo de un día. Entonces escurre con jabón, reemplázala con agua caliente y deja que se empape nuevamente. Presiona y repite hasta el momento en que ya no desprenda burbujas.
Cómo lavar una corbata de seda
La seda solo ha de ser limpiada si está manchada, si no, déjala en paz. Ciertos aconsejan limpiar en seco la seda, otros advierten que no. Salvo que se usen para lavar con mucho cuidado, los productos químicos de limpieza en seco para lavar y sacar las manchas de la corbata pueden dañar los tejidos frágiles como la seda. Además de esto, en las tintorerías presionan la ropa tras limpiarla, lo que puede dañarla y dejar un pliegue afilado que no es el aspecto que debe tener una corbata de seda.
Si haces que se limpie en seco, asegúrate de indicar el área de decoloración en la tintorería a fin de que sepan que deben prestarle atención, dales instrucciones sobre de qué forma presionar la prenda, y pídeles que empleen sus productos químicos más suaves. Si no quieres limpiar en seco tu corbata de seda, aquí tienes otros métodos o trucos para tratar manchas difíciles de sacar en corvattas:
Primero, no remojes la seda en agua. No es agradable para la seda. Si los primeros intentos con no eliminan la mancha, prueba una combinación de calor, un rociador de agua ligera, tejidos blandos y tiempo. Ponla en una toalla sobre un radiador o una fuente de calor afín. Salpica la mancha ligera y uniformemente con agua y pasa un trapo al tejido. Déjala en la fuente de calor a lo largo de la noche. Repite si es necesario.
Otra de las ideas para eliminar la suciedad en las prendas de vestir es limpiar con un quitamanchas comercial o bien alcohol casero para frotar. Siempre y en toda circunstancia prueba el quitamanchas en la parte de la tela que está fuera de la vista. Si se descolora la seda o el color se corre o descolora, no lo use.
Estos métodos o trucos para lavar te serán de gran utilidad para poder lavar las prendas delicadas, no obstante, si no consigues eliminar la mancha, entonces es hora de que te compres una nueva.
Lana o algodón
En la actualidad, las corbatas están hechas de muchas telas diferentes. Lana, algodón, lino, incluso cuero. Un truco para lavar y sacar las manchas de la corbata es tratarlas tal y como si fuera una camisa o un pantalón del mismo material.
La lana y el algodón se encogen con el calor. Del mismo modo que un jersey de lana, las corbatas de lana se pueden tornar turbias y desfiguradas tras mojarse. Las de lino se arrugan mucho tras ser lavadas.
Como hemos mencionado en este artículo, si se ensucia, actúa rápidamente. Limpia la mancha con agua fría, puesto que esto impide que se expanda el churrete. El agua con gas es una buena opción. Si le cae algún material graso en el textil, como la salsa de un filete de carne no servirá. Pon un poco de talco cuanto antes. El polvo absorberá la grasa. Tras unas horas, cepilla el resto sobrante y limpia con un paño suave. La suciedad de la desaparecerá.
Si la llevas alavar a la tintorería, solicite particularmente que no las aprieten. La mayor parte de las tintorerías lo hacen. En muchas ocasiones al planchar una corbata se presionan sus bordes enrollados y se arruina su forma.
Recomendaciones para cuidar tus corbatas correctamente
Una buena corbata puede ayudarte a que combines todo tipo de ropa, como por ejemplo, camisetas, camisas o pantalones, así como cualquier tipo de traje. No obstante, son prendas frágiles. Si no las cuidas, se pueden deteriorar con mucha facilidad. En vez de ser una prenda imprescindible, si no cuidas tus corvattas, no sólo perderás tu dinero, si no que también tu vestuario quedará reducido y no podrás realizar tantas combinaciones de ropa.
Ten mucho cuidado cuando la desates o quites el nudo. Tras un largo y estresante día de trabajo, quitartela será lo primero que hagas cuando llegues a tu casa. Pero no deberías hacerlo con prisas y evita sacar o jalar el extremo delgado a través del nudo ya que puede quedar arrugada y por lo tanto deteriorarse. Si deseas que duren mucho tiempo, deshaz el nudo siguiendo los pasos de atado del revés, es decir, desata el nudo invirtiendo el método utilizado para atarlo.
Ya sean originales, estampadas o estrechas si tienes precaución a la hora de desatar el nudo los diseños textiles seguirán como el primer día.
Al guardarla hazlo correctamente. Muchos hombres la enrollan, la meten en un cajón o la ponen sobre una silla. Ten en cuenta que están hechas de un tejido frágil y son muy delicadas. Por eso es necesario que la cuelgues sobre una percha o un guardarropa o armario para evitar que se deterioren. Colgarlas correctamente facilita que los pliegues y dobleces de un nudo se caigan.
Si vas a viajar y no llevas maletas, dóblala en cuatro y ponlas en el bolsillo de tu abrigo. Eso evitara que se deteriore durante el trayecto.
Otras opciones para guardarlas en corbateros y las cajas o cajones alargados.
Evita las arrugas. La mejor forma de eliminar las arrugas sin arruinarlas en el proceso es utilizando vapor. Para facilitar la eliminación de las arrugas cuelgala en el baño en algún anaquel o bara en la mampara o de sujetar cortinas mientras te duchas con agua caliente. Para las arrugas más difíciles, considere la posibilidad de comprar un vaporizador de mano. Otras opciones son utilizar un secador de pelo o una plancha de cabello.
Mucho cuidado cuando pongas tachuelas. Para eludir estos orificios en la parte delantera de la corbata, introduce el alfiler en la tela trasera y después con la camisa. Otra alternativa para lograr que se quede pegada a la camisa es utilizar los keeper invisibles de plástico, de esta forma evitarás tener que agujerear la tela con una aguja.
Ten en cuenta cuáles son las sustancias y alimentos que pueden crear manchas difíciles de quitar. Como por ejemplo el chocolate, el café, el zumo o jugo de frutas, la hierva, la grasa, las salpicaduras de tinta, el petróleo o gasolina, las salsas de tomate o pimentón, la fanta o soda de naranja, el sudor, el vino o la lejía.